Cosas estúpidas: Amores platónicos.

Es súper nerdy esto, pero aquí vamos… soy niña, osea ya ni tan niña porque estoy como grande y toda una universitaria (floja y dormilona, pero universitaria de todos modos) por lo cual como toda niña (pseudo adolescente tirada para mujer casi responsable) tengo un montón de amores platónicos y como buen amor platónico son totalmente inalcanzables. Los idealizo y los miro y pienso “weón, de verdad voy a morir sola porque no existe nadie así en este mundo. NADIE” y es cierto, porque gran parte de mis amores platónicos son… ficción, creados por la mente brillante de alguien. No sé si agradecerles u odiarles por hacer que mis expectativas en los hombres sean tan altas.

Mis primeros amores platónicos en ficción obviamente fueron lo de los cuento de hadas, para mi papá yo siempre fui y seré su princesita, y como buena princesita yo tenía mi cama de corazones como mi plumón de rosa que me gusto como hasta los 7 u 8 años, después yo quería una cama normal (fue en la misma época donde dejo de gustarme el rosa Barbie). Me compraban cuentos y mi papá me los leía antes de dormir. El primero fue el príncipe de la bella durmiente, siempre me gusto esa historia más que las otras, peleaba a la par con el príncipe de la sirenita… jamás leí el cuento pero las historia de la película me las sabía de memoria. Mi idea era que al crecer, conocería a alguien así y sería feliz.

Pero cuando entre a kínder y en mi casa se veía el Chilevisión, en las tardes daban el club de los tigritos y yo veía Sakura Card Captor…. Y aquí me dentendré un ratin. Es que tengo para rato.

Con mi mamá veíamos todos los animes que daban, Evagelion, Hamtaro, Full metal Alchemist, Sakura…. Sakura, Sakura, es que yo quería ser como ella, tenía un hermano adorable, una amiga que le hacía ropa bonita, un peluche que volaba, era bacán porque salía a capturar cartas y peleaba y hacía todo con 10 años. Y tenía a este rival que era guapo y que en un principio se odiaban y luego ya no. Shaoran.

Esto es súper patético y Nerd porque gran parte de mi vida he estado enamorada platónicamente de Li Shaoran, un personaje de un anime. Serie que he visto miles de veces, que me descargaron, las dos películas y la serie que es pseudo continuación pero que más que nada es un crossover donde muestran  a Shaoran y Sakura de grandes y él está tan enamorado de ella que se va a un viaje ultra peligroso solo por recuperar las memorias de ella, sabiendo que de hacerlo  el precio que debe pagar es que ella jamás vuelva a recordarle. ¿Cómo no quererlo si es el hombre perfecto? Culpa de las CLAMPS, las odio, las amo y las vuelvo a odiar.

Entre medio también me gustaron personajes de otras series pero nada tan duradero como Shaoran, si hasta soñé con él. Ya lo dije, es patético y soy una niña rara.

Pero el problema surge cuando le tomé gustito a los libros. Mami, ¿por qué me criaste tan soñadora? No es que te quiera culpar pero alguien debió ponerle freno a mi imaginación y hacerme un poco más realista. En los libros siempre había un personaje que me gustaba y me hacía suspirar, en estos momentos no recuerdo ninguno, porque es de cuando tenía como 12 y 13 años y eran principalmente de los libros del colegio o cosas que encontraba. Aunque admito que siempre me gusto Romeo, de Romeo y Julieta, ahora como que le odio/amo un poco, es que ya no paso las novelas tan cursi donde se aman con locura, no lo encuentro verídico.

Mi segundo amor platónico que me dio con fuerza fue el que toda mujer que ha visto o leído “Orgullo y Prejuicio” va a amar el resto de su miserable vida. Mr. Darcy… Jane Austen ¿Por qué creaste a alguien tan perfecto? Todas hemos querido ser Elizabeth y que se te declaren con una hermosa carta y que peelen por ti, que se traguen su orgullo y todo lo demás. Si ver la película es terrible para mi corazón solitario, leer el libro es una tortura, al final de cuentas Darcy y Elizabeth se volvieron pieza fundamental de mi vida y para los 14 de Febrero una señorita Márquez, una señorita Márquez… y otra señorita Márquez, se reunían a ver la película comiendo helado de piña u alguna cerdería.

Después ya más grande vinieron mis amores platónicos un poco más reales. Los actores y de esto quiero destacar a dos: Joseph Gordon Levitt y Dylan O’brien son los que ahora más fuerte me han dado, el primero porque simplemente lo amo desde que vi “500 days with Summer” y el segundo porque es guapo y es imposible no amarlo, además que el papel que hace en The First Time es…. Dylan, te amo.

Estoy resumiendo esto porque ponerme a hablar de todos mis amores platónicos sería como mucho, en fin…creo que haría una pequeña lista de todos pero me da lata, no recuerdo cada uno de ellos y no quiero olvidar a alguien importante fuera de la lista. Solo les diré que he amado tantos personaje de libros como de animes y películas. En fin, moriré sola, porque los libros, las películas y las series se han encargado de crear hombres tan perfectos que es difícil encontrar a alguien así en la realidad.


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